Cómo muchos de ustedes saben, soy un investigador incansable y un fan de aprender y promover nuevos conocimientos, no obstante, cuando te planteas promover nuevas tendencias en cualquier contexto, te encuentras con una inmensa resistencia al cambio y la verdad es que podemos decir que es normal, porque las mayorías le temen a lo desconocido.
Aunque me desempeño en varios campos profesionales, tengo una especial inclinación por las finanzas, la tecnología y la educación, no obstante, lo contradictorio es que las finanzas son tal vez el negocio más tradicional del mundo, y por lo tanto cuando un profesional de la innovación como yo, se desempeña en el mundo de las finanzas se convierte en una especie de revolucionario en las organizaciones que toca. No obstante, quiero destacar que la revolución a la que me refiero es a una revolución de ideas y conocimiento que suelen mover los cimientos de las empresas en las que me desenvuelvo.
Hace casi 6 años promoví e inicié una estrategia de #TransformaciónDigital en un banco de la localidad donde vivo y desde ese entonces dibujamos un roadmap con tecnologías que hoy en día se han consolidado entre las que puedo mencionar #microservicios, #contenedores, #blockchain, y #cloud, entre otras y a pesar del éxito que hemos tenido y de las horas de vuelo que tenemos en estos temas, no deja de ser un reto avanzar diariamente hacia nuestros objetivos.
El camino de un proyecto no está exento de indecisiones, caídas, fracasos y momentos de tensión, sin embargo, esto nunca detendrá a un equipo perseverante ya que creen en la eficacia de sus estrategias, en el talento de sus miembros y se basan en la autenticidad de los valores e intenciones de todas las personas.
No es fácil trabajar sin descanso hasta el final, ya que si lo fuera el mundo no sería como lo es ahora, ya que seguramente las buenas causas siempre ganarían. Sin perseverancia, los planes no se convertirán en acciones y siguen siendo sólo intenciones.
Confucio señaló: “No vemos las cosas como son, las vemos como somos”. Si somos fatalistas, nos rendiremos a mitad del camino y no persistiremos en nuestros esfuerzos. Desde esta perspectiva es posible entender que la razón de nuestros fracasos es una clara manifestación de la pérdida de confianza en nuestros propios talentos. Por el contrario, tener siempre presente el significado de nuestros valores puede convertir los obstáculos en oportunidades.
Hay un dicho popular que dice que “..,la gota rompe la piedra, no por su fuerza sino por su perseverancia”, sin embargo, muchas personas desean el éxito sostenido pero no están dispuestas a esforzarse lo suficiente, porque la perseverancia “duele”.
La perseverancia es el secreto del éxito y la gran paradoja es que algunas personas se resisten a esta realidad, otras la evaden y otras se niegan por completo; sin embargo, todos están ansiosos por cosechar resultados. Por lo tanto, las organizaciones trabajan duro para definir su estrategia, pero en el momento equivocado, algunas personas miran hacia los lados y pierden de vista sus metas. ¿razón?… Henry Ford, solía decir que “Los obstáculos son esas cosas espantosas que ves cuando apartas los ojos de la meta”.
El día de hoy me despido con la siguiente pregunta ¿estas enfocado en tu meta o apartaste la mirada de ella?. Si deseas profundizar más sobre nuestros enfoques contáctanos a dmartinez@alfago.net y +507 6975-9846.
David Eduardo Martínez Boucchechter
Comentarios recientes